Luis Kunty Caicedo en su momento fue uno de los mejores defensas centrales del fútbol ecuatoriano. En la actualidad, el futbolista intenta recuperar ese nivel actuando en el Atlético Huila de Colombia.
El jugador, que salió de Independiente del Valle, tuvo pasos por Cruzeiro de Brasil, Barcelona SC, Juventud Italiana y Liga de Quito. Este último club no guarda un buen recuerdo por parte de sus hinchas.
Caicedo, que militó en el conjunto universitario desde el 2019 hasta el 2022, contó que cuando los aficionados lo reprochaban estuvo a punto de estallar e incluso cometer actos que podían afectar su vida.
“Se me venían esas cosas malas a la cabeza; para eso yo decía: ‘Dios mío, dame fortaleza, porque no puedo cometer esas cosas. Dame la mejor decisión. Ayúdame, porque la verdad ya estoy a punto de cometer alguna locura aquí”, explicó.
“Llegó un momento en el que colapsé, no aguantaba, no me sentía a gusto ahí. En mí, podía hasta cometer alguna locura en algunos de esos momentos, salir con mi familia y que un hincha me dijera algo, bajarme del carro… Porque tenía esa mentalidad de que, si algún hincha me diga algo, soy capaz hasta de matarlo a golpes”, añadió en conversación con Un toque de fútbol, con el periodista Pepe Mera.
El defensor no oculta que su malestar era grande; que, alguna vez, aficionados universitarios fueron a reprochar a los jugadores al complejo de entrenamiento y él fue el que salió a dar la cara.
“Un día también fueron los hinchas al complejo a hacer problemas; fue ahí que dije: ‘Este es el momento para sacar toda esta rabia’. Cuando ellos entraron (al complejo universitario), fui el primero que salté contra todos. La rabia que tenía era para pelear con quien sea. Y el profesor (Pablo Repetto) me decía que no, que no haga eso, pero cuando me hablaba ya estaba adelante con esa furia”, contó.
“Decía: ‘Al que se me cruce, con piedras en la mano, porque no los aguanto más’. Atrás mío venía la Musa (Anderson Ordóñez), Franklin (Guerra), el Choclo (José Quintero), venían todos, pero no esperé que ellos me insultaran. Por cómo me sentía con la rabia e impotencia, quería descargar mi rabia contra cualquiera de ellos”, concluyó Caicedo.
Fuente: El Universo
