Mientras el Ministerio de Salud Pública (MSP) ha confirmado la presencia de la variante EG.5 del coronavirus en Ecuador, especialistas dan sugerencias y recomendaciones.
El MSP mencionó que hay tres casos de esa nueva variante en la provincia de Pichincha, es de preocupación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y hay aumento de casos en países como Canadá y Colombia.
Paúl Cárdenas, investigador del Instituto de Microbiología de la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), mencionó que la EG.5 se detectó hace unas semanas, se han registrado tres casos en Pichincha desde julio, pero sigue siendo una variante que no ha desplazado a las anteriores, y la principal -desde abril- sigue siendo XBB.1.5.
Francisco Pérez, subsecretario de Vigilancia, Control y Prevención de la Salud del MSP, indicó que la variante que predomina es la XBB.1.5.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) detalló que XBB.1.5 es un recombinante de dos sublinajes BA.2 y se había reportado su presencia en 38 países.
La otra variante de interés con mucho mayor número de mutaciones llamada XBB.2.86 no se ha detectado aún en el país, indicó el experto.
EG.5 no tiene ninguna característica diferente ni clínica ni en gravedad que las anteriores, sin embargo, como todas las variantes que van cambiando escapan de cierta manera al sistema inmune y puede producir reinfecciones más comúnmente, explicó.
Gabriela Zambrano, especialista en medicina interna y docente universitaria, sostuvo que la XBB.1.5 es como un resfriado común y es la prevalente.
“Por eso es la importancia de vacunarse con vacunas actualizadas para las nuevas variantes. En este caso las bivalentes que llegaron al país, y estar pendientes porque en octubre saldrán vacunas más actualizadas aún”, dijo Cárdenas, en referencia a que desde el mes pasado en Ecuador hay vacunas actualizadas.
El médico Esteban Ortiz indicó que a la EG.5 también se la conoce como Eris.
Citó a los CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades) de Estados Unidos, según las cuales la EG.5 ha sido responsable del 20,6 % de los casos de COVID-19 en ese país hasta la tercera semana de agosto, superando a otras variantes como FL.1.5.1.
“Los síntomas son similares a otras subvariantes de ómicron, afectando principalmente el tracto respiratorio superior. Sin embargo, las personas mayores de 65 años o con sistemas inmunológicos comprometidos están en mayor riesgo de infecciones severas”, sostuvo Ortiz.
En julio pasado arribaron al país 262.080 dosis de vacuna bivalente de la empresa Pfizer-BioNtech. Luego fueron distribuidas en las nueve coordinaciones zonales del Ministerio de Salud Pública (MSP), a nivel nacional.
El ministro de Salud, José Ruales, mencionó la semana pasada que ya se había inmunizado con esa vacuna a unas 60.000 personas.
Por el momento, personal sanitario, adultos mayores, personas con enfermedades preexistentes y pacientes vulnerables son el grupo priorizado al que se le está colocando la vacuna bivalente.
A criterio de Zambrano se debería fomentar y ampliar la vacunación a la población en general con la bivalente que sí cubre contra esta variante e incluso administrarla en forma privada.
