La ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, reconoció este miércoles -22 de mayo- que la Ley Reformatoria para Erradicación de la Violencia y el Acoso Laboral contiene contradicciones que generan preocupación entre los empleadores.
La principal contradicción, según Núñez, se encuentra en la definición de violencia y acoso laboral. La ley establece en una parte del texto que estos actos pueden ocurrir “una sola vez o de manera reiterativa”, mientras que en otra señala que deben ser reiterativos.
Esta ambigüedad se observa en los artículos 2 y 10 de la ley, donde se describen la violencia y el acoso laboral, y se incluye la “no desconexión digital” del trabajador como un tipo de violencia. Esto significa que un empleador podría ser denunciado por acoso laboral si contacta a un trabajador fuera de su horario laboral, incluso si lo hace una sola vez.
Núñez ha aclarado que la responsabilidad de interpretar la ley recae en los legisladores, los jueces y la Corte Constitucional, y que ella, como ministra, solo puede elaborar el reglamento que determine los procedimientos. Sin embargo, ha expresado su preocupación por las posibles repercusiones de la ley en el sector laboral.
La posibilidad de ser denunciado por acoso laboral por un simple contacto fuera del horario laboral ha generado inquietud entre los empleadores. Muchos temen que la ley pueda ser utilizada de manera infundada para generar demandas o dañar la reputación de las empresas.
En otro tema, la ministra Núñez ha anunciado que se están realizando ajustes normativos para que la modalidad de “jornada parcial permanente” pueda ser utilizada de manera más flexible por el sector agroexportador. El objetivo es fomentar la creación de empleo en este sector.
Por último, Núñez ha destacado que desde la entrada en vigencia de la Ley de Eficiencia Económica y Generación de Empleo en diciembre de 2023, se han registrado 103.000 nuevos contratos de jóvenes. La ley ofrece incentivos tributarios a las empresas que contraten jóvenes.
