Entre las labores que demanda la transición, al alcalde electo le surgen otras inquietudes, como que personas se estarían tomando el nombre de la futura administración municipal para reunirse con gremios. Muñoz, de forma tajante, dice que no tiene funcionarios designados y que, por lo tanto, el único vocero es él.
Desde que se conocieron los resultados electorales, Pabel Muñoz no ha parado de reunirse con varios sectores y actores, incluyendo al alcalde saliente, Santiago Guarderas, para tener el panorama más claro de cómo recibirá la ciudad.
¿Su primera impresión es que recibe la ciudad más complicada de lo que pensaba?
No sé si más complicada de lo que imaginaba, pero desde el inicio sabíamos que Quito tiene problemas como ciudad y la Alcaldía como institución. El desempleo, la delincuencia y el aumento de la pobreza son pandemias que afectan a la capital. La falta de diligencia, el maltrato a los ciudadanos en algunos servicios, no voy a generalizar, son problemas del Municipio.
Un Municipio que además se dice que está inflado.
Un Municipio que no está claro en su sobredimensionamiento, pero tampoco me quedo con las lecturas alarmistas y extremistas de que es imposible que esa maquinaria burocrática se puede mover. Pero, evidentemente, sé que tiene que entrar en un proceso de adelgazamiento, si podemos usar el término, optimización de eficiencia, de mejora en la calidad de los servicios que presta.
¿Cuál es la cifra de funcionarios municipales que maneja?
Cerca de 22 mil funcionarios y evidentemente suena a grande, pero también es cierto que no se lo puede comparar con otros municipios. Por ejemplo, no tienen un subsistema de educación y los maestros suman a la nómina. Lo mismo pasa con el subsistema de salud. Quito tiene tres centros y uno de ellos es prácticamente un hospital del día y es obvio que ahí tengamos más personal. Pero, por supuesto, me preocupa cuánto ha crecido y la falta de agilidad en los procesos. Llegaré a modernizarlos y a mejorar la autoestima del servidor municipal.
¿Y el Metro de Quito se suma a las preocupaciones?
Luce complicado, porque a ratos me da la sensación de que hay un laberinto de información. Lo que quiero es esclarecer la información de cara a la ciudadanía, no me interesa esclarecerla para mí o mi equipo de trabajo, peor aún para las autoridades actuales. Lo que me interesa es decirle a la ciudadanía, a ver: el contrato ya terminó sí o no; Acciona (la empresa constructora) ya le entregó de manera inventariada toda la construcción a la empresa Metro de Quito sí o no; la empresa Metro de Quito ya le pasó la operación al consorcio definido sí o no.
También ha pedido que algunos procesos paren para ser tratados por la nueva administración, ¿cuáles?
Tenemos el proceso de licitación para la extensión del contrato sobre revisión vehicular que se demoró, y si ya se demoró y no ha empezado hasta este momento ¿por qué empezarlo ya? Ahí más bien pienso que lo que es propicio y una de las formas en las que se puede enfrentar el tema, sin que sea la mejor, es extender el contrato que ya existe.
¿Pese a que los ciudadanos reclaman constantemente por ese servicio?
Así es. Ese es un contrato malo y estoy del lado de la ciudadanía porque también soy ciudadano que me he enfrentado a los trámites municipales. Veo que es un viacrucis para mucha gente toparse con el proceso de revisión vehicular, además que siendo un problema de quienes prestan el servicio están queriendo cobrar multas y recargos sobre una culpa que no tuvieron los ciudadanos. He pedido el análisis y espero una respuesta para, si es posible, condonar esas deudas siempre que haya la base legal para hacerlo.
Se ha reunido con algunos concejales electos, ¿cree que tendrá gobernabilidad?
Son tan claros los problemas que tiene la ciudad y, por momentos, tan evidentes sus soluciones que me parece que vamos a tener poco tiempo para discutir de lo que nos separa y más bien vamos a estar trabajando y diría hasta con unanimidad la mayor parte del tiempo. Me extrañaría que alguien se muestre contrario a la lucha contra la delincuencia o no esté de acuerdo que Quito necesita aumentar sus oportunidades productivas y laborales. Creo y espero que le demos un mensaje al país que cuando se quiere se puede lograr tener una mayoría entre una Alcaldía y un Concejo Metropolitano responsables.