José Pileggi asumió la presidencia de Emelec en 2023, con la expectativa de mejorar el rendimiento del club tras una primera temporada con altibajos. Sin embargo, el 2024 se ha convertido en uno de los años más complicados para el equipo, que atraviesa una crisis institucional sin precedentes.
Emelec ha enfrentado deudas millonarias, la imposibilidad de fichar nuevos jugadores y malos resultados en el campo, además de salarios atrasados. Esta situación ha impedido que el equipo rinda a un nivel competitivo en el campeonato ecuatoriano, y hasta ahora no hay señales de una pronta mejoría.
El club intentó una renovación en 2024 al fichar a Christian Noboa, un ídolo del equipo, y prescindir de jugadores problemáticos como Miller Bolaños. Además, sumaron varios refuerzos extranjeros de renombre.
A pesar de estos esfuerzos, el equipo no ha logrado buenos resultados. Noboa, quien aún no ha debutado por lesión, y los refuerzos extranjeros no han cumplido con las expectativas. Para agravar la situación, exjugadores han demandado al club por deudas pendientes, empeorando aún más la crisis financiera.
El mal momento deportivo, sumado a la crisis institucional, ha llevado a José Pileggi a considerar su renuncia a la presidencia. En una entrevista con Diego Arcos para DirecTV Sports, Pileggi mencionó que su principal preocupación es la seguridad de su familia.