En medio de un complejo escenario nacional marcado por el paro y la inseguridad, el presidente Daniel Noboa renovó un nuevo estado de excepción para varias provincias del país, entre ellas El Oro, una de las más golpeadas por el crimen organizado y los altos índices de muertes violentas.
La disposición, contenida en el Decreto Ejecutivo N.º 175, fue firmada el 5 de octubre desde Quito y establece una vigencia de 30 días. La medida alcanza a las provincias de Guayas, El Oro, Los Ríos, Manabí, y al cantón Echeandía, en Bolívar.
El documento señala que la decisión responde a una situación de “grave conmoción interna”, tal como ya se había declarado en los decretos 76 y 109, emitidos en agosto de este mismo año. Con esta nueva renovación, el Ejecutivo busca mantener el control frente al incremento de la violencia criminal y la amenaza persistente de organizaciones delictivas que operan en el litoral.
En El Oro, la medida llega en un contexto de tensión creciente. Durante las últimas semanas se han registrado ataques armados, extorsiones y asesinatos vinculados a disputas entre grupos delictivos por el control de rutas del narcotráfico y del contrabando fronterizo.
Las autoridades locales han respaldado la decisión del Gobierno, aunque la ciudadanía expresa preocupación por los resultados. “Necesitamos que el estado de excepción no sea solo presencia militar, sino también acciones sostenidas contra las mafias”, comentó un comerciante del centro de Machala.
El decreto autoriza la movilización de Fuerzas Armadas y Policía Nacional para apoyar las operaciones de seguridad, realizar controles en zonas estratégicas y garantizar el orden público. Además, contempla restricciones de movilidad en horarios específicos, según las disposiciones de cada jurisdicción.
Radio











