Un video publicado por el influencer español Arce de Viajes ha generado una ola de reacciones en redes sociales y en la comunidad otavaleña, luego de que este cuestionara públicamente a la alcaldesa del cantón, Anabel Hermosa, por negarse a vestir el atuendo tradicional kichwa durante la celebración del Warmi Puncha, una de las festividades más significativas para los pueblos originarios.
En su publicación —que rápidamente se viralizó y que fue compartida en plataformas como TikTok, Facebook, Instagram y YouTube, donde Arce suma más de 183 mil seguidores— el creador de contenido expresó su inconformidad con la actitud de la funcionaria. “No quiso vestirse, no quiso compartir, y eso demuestra una desconexión con las raíces de su propio cantón”, declaró, subrayando que su crítica se basa en el simbolismo profundo de esta festividad y el valor de participar activamente en ella.
El Warmi Puncha, o “Día de la Mujer” en kichwa, es una jornada de profundo significado espiritual y comunitario, en la que se honra la sabiduría, fuerza y papel fundamental de las mujeres indígenas. En este contexto, la negativa de la alcaldesa a portar la vestimenta tradicional ha sido vista por muchos como una señal de desapego y falta de sensibilidad cultural.
Las reacciones no se hicieron esperar. Una ciudadana otavaleña, cuya declaración también se difundió ampliamente en redes sociales, recordó que esta no es la primera vez que se señala a Hermosa por su actitud frente a los símbolos culturales del cantón. “El año pasado folklorizó la ropa, usó elementos culturales de forma inapropiada, y ahora simplemente se niega a usarla. Eso es una falta de respeto. La intención de las mujeres que le llevaron la ropa era compartir su cultura, no imponerle nada”, expresó con firmeza.
La misma usuaria concluyó con una reflexión que ha resonado entre la ciudadanía: “La primera autoridad no lo es por título, es la primera servidora del pueblo. Lo mínimo que se le exige es respeto”.
Hasta el momento, la alcaldesa Hermosa no ha emitido ningún pronunciamiento oficial sobre la polémica, pese a la creciente presión tanto en medios digitales como en espacios comunitarios.