El hecho de que dos candidatos a las elecciones extraordinarias de Ecuador hayan sido detenidos con un arma de fuego sin permiso es un asunto serio. Es importante que las autoridades investiguen este asunto y que tomen medidas para garantizar que no haya violencia política durante las elecciones.
El primer candidato, José Becerra, fue detenido el 4 de agosto con un arma sin el respectivo permiso. Becerra explicó que posee el arma desde hace ocho años y que el permiso estaba en trámite, tras haber expirado. La Fiscalía no ha presentado cargos contra Becerra, pero la Comisión de Control de Armas de Fuego ha solicitado una audiencia para determinar si debe retirarle el permiso para portar armas.
El segundo candidato, Justo L., fue detenido el 9 de agosto con una pistola calibre 22, cartuchos, un chaleco antibalas y un radio transmisor. L. es candidato a una curul como alterno en la lista de la Revolución Ciudadana en Manabí, circunscripción 2. Se movilizaba por Manglaralto (provincia de Santa Elena) junto a una persona, quien no ha sido identificada hasta el momento, cuando fue abordado por agentes en una inspección de rutina.
Fue puesto a órdenes de la Fiscalía, pero aún no se ha presentado una acusación en su contra. La Revolución Ciudadana no se ha pronunciado sobre este hecho. El periodista Christian Zurita afirmó que L., luego de ser detenido, realizó una llamada a Adolfo Macías, alias Fito, el líder de Los Choneros, para intimidar al agente. Esta información también la difundió el portal Código Vidrio.
Es importante que la Fiscalía investigue estos casos y que tome medidas para garantizar que no haya violencia política durante las elecciones. La violencia política es un problema serio que puede tener consecuencias devastadoras para el país. Es importante que las autoridades tomen medidas para prevenir la violencia política y para garantizar que las elecciones se lleven a cabo en un ambiente seguro y pacífico.
