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El exfutbolista brasileño Robson de Souza, más conocido como Robinho, fue detenido el 21 de marzo en su ciudad natal de Santos para cumplir una condena de nueve años de prisión por violación grupal. La orden de arresto fue emitida por la justicia italiana en 2017 y confirmada por el Supremo Tribunal Federal de Brasil en 2022.
Robinho fue condenado por la violación de una joven albanesa en una discoteca de Milán en 2013. El exjugador del AC Milan, Real Madrid y Santos siempre ha negado los cargos, alegando que la relación con la víctima fue consensual.
La detención de Robinho se produjo después de que el Tribunal Superior de Justicia de Brasil (STJ) rechazara un recurso presentado por sus abogados para evitar su encarcelamiento. El STJ determinó que la condena italiana debía ser cumplida en Brasil, ya que el país no extradita a sus ciudadanos.
Robinho se encuentra actualmente en una prisión de Santos. Se espera que en los próximos días sea trasladado a una cárcel de régimen cerrado, donde cumplirá el resto de su condena.
La noticia de la detención de Robinho ha generado gran repercusión en Brasil y en el mundo del fútbol. Diversas personalidades han condenado el crimen del exfutbolista, mientras que algunos de sus excompañeros de equipo han expresado su apoyo.
Este caso ha puesto de relieve la importancia de la lucha contra la violencia sexual, tanto dentro como fuera del ámbito deportivo. La decisión del STJ de hacer cumplir la condena de Robinho en Brasil es un paso importante en la búsqueda de justicia para las víctimas de este tipo de delitos.
Además de la condena por violación grupal, Robinho también enfrenta una demanda civil por parte de la víctima. La joven albanesa exige una indemnización por los daños y perjuicios sufridos.
