La Agencia de Regulación de Hidrocarburos (ARCH) suspendió las operaciones de las gasolineras de la empresa Copedesa Gasgrupco, propiedad del alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, y sus hermanos Antonio y Mario; en medio de las investigaciones por el Caso Triple A.
La suspensión, que afecta a estaciones en varias provincias, incluidas Guayas, Santa Elena y Manabí, se da en el marco de investigaciones por presunto tráfico de combustibles.
Las autoridades, acompañadas de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, allanaron estaciones de Copedesa en Guayaquil y Milagro como parte de las diligencias.
La transacción la habría realizado Fuerlcorp S.A., que habría adquirido 1.238.798 galones de diésel y vendido 2.029.516 galones, por lo que habría facturado 745.718 galones adicionales.
En la denuncia de la Arcenm consta: «Producto de esta información complementaria, se identificó que Gasolineras Copedesa Gasgrupco facturó a Fuelcorp 2.183.546 galones de diésel.
De la revisión efectuada, Gasgrupco no corresponde a una comercializadora autorizada para el abastecimiento de combustible a Fuelcorp S.A.».
La Fiscalía General del Estado investiga a los hermanos Álvarez por presuntas irregularidades en la comercialización de diésel, relacionadas con la empresa Fuelcorp S.A., en lo que ha sido denominado el Caso Triple A.
En la trama revela que el alcalde de Guayaquil, es presidente de 18 empresas y gerente de 3, de las 21 compañías donde también participan sus hermanos. De estas, solo 2 han aportado al Servicio de Rentas Internas (SRI).