El oro ha alcanzado un nuevo hito este viernes 16 de agosto al superar los $2,500 por onza, impulsado por las expectativas de una posible reducción de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.
El precio del oro al contado subió un 1.8% en la jornada, respaldado por datos decepcionantes del mercado inmobiliario estadounidense que han intensificado las expectativas de que la Reserva Federal podría proceder con recortes de tasas más profundos y rápidos.
A lo largo del año, el oro ha experimentado un incremento cercano al 20%, alimentado por la creciente esperanza de flexibilización monetaria y la compra significativa por parte de bancos centrales.
Además, el oro ha visto un aumento en la demanda como refugio seguro debido a los riesgos geopolíticos en aumento, incluyendo las tensiones en Oriente Medio y el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Este aumento, registrado este viernes, marca un récord histórico para el metal precioso, superando el máximo previo establecido el mes pasado.