El Día de los Santos Inocentes, celebrado el 28 de diciembre en numerosos países de habla hispana, es una fecha que combina una raíz histórica y religiosa con una tradición popular marcada por el humor y las bromas. Esta festividad, que en 2024 cae en sábado, tiene un trasfondo bíblico ligado a un episodio trágico recogido en el Evangelio de Mateo, pero su significado y forma de celebración han cambiado significativamente a lo largo de los siglos.
Los orígenes en la tradición cristiana
El relato que da origen al Día de los Santos Inocentes proviene de la narración bíblica sobre la llamada «Matanza de los Santos Inocentes». Según el Evangelio de Mateo, el rey Herodes, temeroso de que el recién nacido Jesús llegara a convertirse en el «rey de los judíos», ordenó ejecutar a todos los niños menores de dos años en Belén. Este acto, motivado por la inseguridad del monarca ante una posible amenaza a su poder, ha sido recordado en la liturgia cristiana desde tiempos antiguos. Cada 28 de diciembre, las iglesias conmemoran a los niños que perdieron la vida en este evento, considerado un martirio injusto.
La transformación de la conmemoración
Con el paso de los siglos, el carácter solemne y trágico de esta conmemoración dio paso a un enfoque más festivo y humorístico. Esta transformación estuvo influida por la integración de la festividad cristiana con celebraciones populares de carácter pagano, como la llamada «fiesta de los locos», que tenía lugar en la Edad Media. Estas celebraciones, caracterizadas por la inversión de roles y comportamientos extravagantes, contribuyeron a que el Día de los Santos Inocentes adoptara un tono más ligero y desenfadado.
Hoy en día, esta jornada se asocia principalmente con las bromas, los engaños y los trucos realizados entre amigos, familiares y compañeros de trabajo. En muchas ocasiones, estas bromas se acompañan de la expresión «¡Inocente, inocente!» cuando se revela la verdad tras el engaño.
Celebraciones en España y otros países
En España, la fecha se vive como un día de humor y creatividad. Es común que los medios de comunicación, las redes sociales y las empresas se unan a la tradición publicando noticias falsas o realizando anuncios ficticios con fines humorísticos. Esta costumbre no solo fomenta la interacción entre las personas, sino que también permite a las marcas conectar con su audiencia de forma ligera y divertida.
Por otra parte, en otros países de América Latina, como México, Venezuela y Colombia, el Día de los Santos Inocentes también se celebra con bromas y engaños, aunque las tradiciones específicas pueden variar. En algunos lugares, se vincula la fecha con la práctica de pedir prestado objetos o dinero y luego negarse a devolverlos, siempre en un tono jocoso.
Una jornada para el humor y la convivencia
Aunque su origen está profundamente enraizado en un episodio de dolor, el Día de los Santos Inocentes se ha convertido en una oportunidad para disfrutar de la compañía de los demás, compartir risas y relajarse. Es un día que rompe con la rutina habitual y permite a las personas sumergirse en un ambiente de juego y buen humor, dejando atrás, aunque sea por unas horas, las preocupaciones cotidianas.