El 2025 es el año de consolidación de la exportación de cacao ecuatoriano como el segundo mejor producto no petrolero y no minero del país, superando al banano en su ascenso empujado por una escalada inédita de los precios internacionales que se inició en 2023 con un crecimiento del 64 % que disparó la tonelada de cacao de un promedio de $ 2.500 a $ 4.100 y que en 2024 llegó a superar los $ 11.000.

Pese a estos crecimientos sostenidos, según los reportes de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), en 2023 y el 2024 el cacao no logró remontar, pero sí acercarse al banano, que se mantuvo en el segundo lugar, relegando a la “pepa de oro” al tercero aunque cada mes con menor ventaja.

En 2023 las exportaciones de banano cerraron con $ 3.771 millones y el cacao en $ 1.323 millones, en 2024 la fruta alcanzó $ 3.839 millones en exportación y el cacao cerró muy cerca con $ 3.618 millones, solo a $ 221 millones de diferencia.

Aunque en 2024 el cacao no logró superar al banano sí lo hizo con los enlatados de pescado, que en 2023 ocupaban el tercer lugar en las exportaciones. Ese año los enlatados representaron $ 1.328 millones y el cacao $ 1.323 millones, pero en 2024 el grano los superó por $ 1.942 millones.

La remontada definitiva con el banano se reflejó en enero del 2025 cuando el cacao por primera vez relegó a la fruta con $ 517 millones frente a los $ 353 millones. El crecimiento se consolidó en febrero y marzo, cerrando el primer trimestre del año con $ 1.334 millones en exportaciones de cacao frente a $ 1.116 millones del banano.

El principal mercado del cacao ecuatoriano es Estados Unidos. En el primer trimestre del 2025 las exportaciones al país norteamericano representaron $ 379 millones, con un crecimiento del 100 % en divisas y volumen. La Unión Europea es el segundo mejor destino con $ 334 millones, le sigue Malasia con $ 238 millones.

Problemas de producción en África persisten

Merlyn Casanova, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Exportadores de Cacao del Ecuador (Anecacao), recuerda que la escalada de precios del cacao se inició por el desplome de la producción de los principales países proveedores: Costa de Marfil y Ghana, e indica que actualmente la situación del cacao en África Occidental sigue siendo compleja y determinante para el mercado internacional.

“Factores como las condiciones climáticas no favorables y las bajas perspectivas de producción continúan afectando a la oferta. A esto se suma la baja calidad de las cosechas que está presentando Costa de Marfil”, agrega.

Ghana y Costa de Marfil representan aproximadamente el 70 % de la producción mundial de cacao, pero su productividad se ha desplomado el 50 % y el 20 %, respectivamente.

Alta volatilidad de los precios del cacao

Añade que aunque la producción ha mostrado cierta mejora en comparación con el año pasado, aún no alcanza los niveles del 2023 y su ritmo de recuperación es lento, lo que mantiene la presión sobre los precios internacionales. Por ejemplo, los precios del cacao para entrega en julio del 2025 cerraron el 16 de mayo en $ 10.898 por tonelada en la Bolsa de Nueva York.

Ese viernes el precio cerró en $ 11.052 por tonelada, mientras que el 13 de mayo el precio había bajado a $ 9.338. De acuerdo con Casanova, esta alta volatilidad del mercado en los últimos días no permite establecer con certeza hasta cuándo se mantendrán estos niveles.

Mientras, estos altos precios han permitido que los productores en Ecuador perciban más ingresos. La titular de Anecacao asegura que los productores destinan sus ingresos adicionales principalmente a cubrir necesidades familiares, ampliar cultivos y mejorar sus procesos productivos.

Gracias a estas inversiones –como fertilización, riego y técnicas agrícolas– se espera un aumento en la productividad en los próximos meses. “Ecuador destaca por ofrecer uno de los mejores pagos a sus productores, quienes ahora tienen mayor capacidad para invertir tanto en sus fincas como en su calidad de vida”.

Estima que hasta el 90 % del valor de exportación llega directamente al productor, fortaleciendo así la agricultura familiar y la inversión en el campo.

Sin embargo, esto también ha impactado a las empresas exportadoras. Casanova asegura que uno de los principales desafíos que enfrentan estas compañías ante el incremento histórico en los precios del cacao es el acceso oportuno a liquidez, a esto se suma la creciente inseguridad que afecta a toda la cadena de valor, desde la producción hasta la exportación. Ambos factores dificultan el cumplimiento eficiente y puntual de los contratos establecidos.

Pese a estos desafíos, la dirigente proyecta que el 2025 cerrará con alrededor de 520.000 toneladas de cacao exportadas y más de $ 4.500 millones generados para la economía nacional, resultados que “reflejan no solo el impacto del alto precio internacional, sino también el reconocimiento creciente de la calidad del grano ecuatoriano. Gracias a este contexto, Ecuador se consolida como uno de los principales actores del mercado global y se proyecta como el segundo exportador mundial de cacao”.