El 21 de marzo de cada año se conmemora el Día Mundial del Síndrome de Down, una fecha instaurada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2011 para promover la conciencia sobre esta condición genética y destacar la importancia de la igualdad de oportunidades.
El síndrome de Down, causado por una copia extra del cromosoma 21, afecta a aproximadamente 1 de cada 1.000 nacidos vivos a nivel global, y este día busca celebrar las contribuciones de estas personas a la sociedad.
En esta edición, el lema internacional llama a «derribar barreras», enfatizando la necesidad de garantizar autonomía e independencia a lo largo de toda la vida. Organizaciones como Down Syndrome International lideran eventos, como la 14ª Conferencia en la sede de la ONU en Nueva York, donde se comparten experiencias y estrategias para lograr una inclusión real en salud, educación y empleo.
Según expertos, la educación temprana y el apoyo familiar son clave para que las personas con síndrome de Down alcancen su máximo potencial, desafiando estereotipos y demostrando que sus capacidades van más allá de las limitaciones percibidas.