El Papa Francisco expresó su dolor y condolencias por las víctimas y los afectados por el devastador terremoto de magnitud 7 que sacudió Marruecos el viernes 8 de septiembre.
En un mensaje publicado en X, el Papa dijo que estaba «profundamente entristecido» por la tragedia y que estaba «en oración por las víctimas y sus familias».
«Me uno a ellos en su dolor y les ofrezco mi cercanía», dijo el Papa. «También pido a Dios que conceda su consuelo a los heridos y a los que han perdido sus hogares».
El terremoto, que tuvo su epicentro en la localidad de Ighil, a unos 80 kilómetros al suroeste de Marrakech, causó más de mil muertos y otros miles de heridos.
El Papa Francisco ha sido un firme defensor de la ayuda humanitaria y ha hecho llamamientos para ayudar a las víctimas de desastres naturales en todo el mundo.
En su mensaje, el Papa dijo que la Iglesia Católica estaba «lista para brindar toda la ayuda posible» a los afectados por el terremoto en Marruecos.
«Que el Señor nos ayude a construir un mundo más justo y solidario, donde nadie tenga que sufrir por desastres naturales», dijo el Papa.
