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Durante un operativo militar en el sector de Alto Punino, en provincia de Orellana, el Ejército Ecuatoriano halló los cuerpos de dos presuntos guerrilleros, junto con armamento y material logístico del Grupo Ilegal Armado (GIA) Comandos de Frontera, organización responsable de la emboscada en la que murieron 11 militares.
La operación, liderada por el comandante general del Ejército, Gral. Henry Delgado Salvador, se desarrolló en el denominado Punto Cero con el objetivo de asegurar la zona y neutralizar a los responsables del ataque. En el lugar se encontraron municiones, granadas, explosivos, mochilas, medicamentos y prendas con insignias del grupo armado, confirmando su vinculación directa.
Pese a las complejas condiciones del terreno, se ha desplegado tecnología especializada para continuar el reconocimiento. El Ejército trabaja en coordinación con la Policía Nacional y autoridades judiciales para procesar los hallazgos y avanzar en la investigación.
Las Fuerzas Armadas reafirmaron su compromiso de proteger la soberanía nacional y garantizar la seguridad de la ciudadanía frente a las amenazas del crimen organizado.
