Un Donald Trump “más enojado que nunca” volvió este sábado a los mítines de campaña con la esperanza de impulsar su candidatura a la Casa Blanca con un discurso en el estado clave de New Hampshire antes de viajar a Carolina del Sur.
Dos meses y medio después de anunciar su postulación a las elecciones de 2024, el expresidente estadounidense abandonó los dorados salones de su residencia en Florida para realizar visitas que no deben nada al azar.
New Hampshire y Carolina del Sur estarán entre los primeros en organizar las primarias republicanas a principios de 2024. Una victoria daría a Trump un impulso valioso y necesario para el futuro.
“Necesitamos un líder que esté preparado para enfrentar a las fuerzas que arrasan nuestro país”, dijo el magnate ante una multitud de varios cientos en la pequeña ciudad de Salem.