Esa fue la pregunta que se hizo el periodista James Gallagher, presentador del programa Inside Health (Salud Interior) de BBC Radio 4. Para responderla se sometió a una serie de pruebas científicas y habló con varios expertos.
El resultado de su experimento resultó esperanzador, sobre todo para quienes, como él, no tienen mucho tiempo y quizás muchas ganas de hacer ejercicio de manera formal cada semana.
Aunque es recomendable hacer casi dos horas y media (150 minutos) de ejercicio con intensidad moderada cada semana, alrededor de una cuarta parte de la población ni siquiera se ejercita durante media hora.
Entonces, ¿hay algo más fácil a lo que podamos aspirar? ¿Cuál es la menor cantidad de ejercicio que podría mejorar nuestra salud?
Si hay alguien que desea que los consejos sobre ejercicio sean menos intimidantes, esa es la doctora Zoe Saynor, profesora asistente de fisiología clínica del ejercicio en la Universidad de Portsmouth, quien además es jugadora de rugby de élite retirada.
Ella me va a ayudar a buscar una respuesta. Para lograrlo acepté usar un rastreador de actividad durante una semana.
Los resultados fueron aterradores. Logré solo un minuto de ejercicio vigoroso (equivalente a correr) todos los días y 16 minutos de ejercicio moderado (algo así como una caminata rápida)
«Esa es una imagen que vemos una y otra vez en muchas personas que viven en la sociedad moderna», dice Saynor.
Así que cualquiera que sea el estado en el que se encuentre mi cuerpo, va a depender en buena parte de esa única hora de natación que hago la mayoría de los fines de semana.