Patricia subió a sus nietos de 3 y 7 años en un colchón inflable y los sacó de la vivienda en el barrio Unida Sur, en Milagro. En ese sector, el agua ha estado por encima de la cintura por más de tres días.
Este es uno de los 22 barrios que reportaron inundaciones por las lluvias que azotaron a este cantón de Guayas.
El estero San Miguel y el río Milagro aumentaron su caudal y se desbordaron, provocando que barrios de esa ciudad queden bajo el agua.
Ante esta situación, el cantón se encuentra en estado de emergencia.
Según la Secretaría de Gestión de Riesgos, hay al menos 25.000 predios afectados por el desbordamiento de los ríos debido a las intensas lluvias.
Al momento hay 160 personas en un albergue que se activó en la Unidad Educativa 17 de Septiembre, en Milagro. Allí recibieron un espacio para dormir, kits de limpieza y raciones alimenticias.
Personal del Cuerpo de Bomberos de Milagro informó que hay el 60 % del área urbana y zonas periféricas de Milagro están inundados y que unos 1.000 predios aún continúan bajo el agua.
Vecinos de barrios como Unida norte y sur, Margarita 2, Bellavista, San José, Amor a Dios lamentaron que aún tienen anegadas las calles. Son ríos, no calles.
“Tres días ya tengo con el agua hasta la cintura, ya salí en una colchoneta para buscar leche para los bebés, ya no tenemos qué comer”, comentó la mujer.
Juan León, vocero del Cuerpo de Bomberos de Milagro, manifestó que siguen ayudando a salir a varias familias, que muchas se rehúsan a ir al albergue ya que temen robos en sus viviendas.
Al sitio llegaron brigadas del Ministerio de Salud Pública (MSP) para atender a las familias.
Niños acuden con vómito, diarrea, malestar y ronchas. También un adulto tenía signos de deshidratación debido al vómito que presentaba.
Personal policial también acudió a estos barrios debido a las alertas de robos que se registraron en las últimas horas.
María Arana, residente del sector San José de 67 años, explicó que se dañaron su refrigeradora, sus muebles, entre otros enseres, debido a la inundación de tres días.
“Necesitamos una bomba de agua, que ya saque esta agua, apesta. ¡Hasta cuándo debemos vivir así! Las epidemias van a afectar a mis nietos, por más que los tenga encerrados, yo tengo que salir en balsa a comprar algo de comida, a pedir ayuda”, manifestó la mujer.
Ella llegó al sector Unida sur para hacerse atender con las brigadas médicas y pedir ayuda al Cuerpo de Bomberos para sacar a una persona con discapacidad.
En ese sitio solo se puede ingresar con balsas, botes o en colchones inflables, ya que el agua sobrepasa la cintura.
Moradores de esa zona construyeron unas balsas para hacer cruzar a las personas que salían de su vivienda solo por alimento. Ellos cobraban $ 2 por ayudarlos a salir e ingresar a sus casas.
Allí las mascotas que quedaron en la zona nadaban en medio del agua que cubre todas las calles.
Del 1 de enero al 6 de marzo de este año, 120 cantones han registrado 440 eventos peligrosos por la intensidad de las lluvias.
En el Litoral, a más de Milagro se han afectado cantones como Chone, Santa Elena, La Libertad, Guayaquil y otros.
Hasta la semana pasada se mantenían activos catorce comités de Operaciones de Emergencia (COE) cantonales y tres provinciales, a escala nacional, para gestionar, articular y poner a disposición los recursos necesarios para cubrir las demandas humanitarias y los servicios que podrían verse afectados.
