El calor intenso del verano puede ser peligroso para nuestra salud, especialmente para los adultos mayores y los niños. La deshidratación es un riesgo real que puede prevenirse con medidas sencillas como beber líquidos constantemente y consumir sueros caseros.
¿Qué es la deshidratación?
Es la pérdida excesiva de líquidos corporales, lo que puede ocurrir por la exposición prolongada al calor, la sudoración excesiva o la diarrea.
Síntomas de la deshidratación: sed excesiva, boca seca, mareos, fatiga, dolor de cabeza, orina oscura y escasa
Tres sueros caseros para prevenir la deshidratación:
1. Suero de agua, azúcar y sal:
Hervir un litro de agua.
Agregar cuatro cucharadas de azúcar y una de sal.
Mezclar hasta que se disuelvan.
Beber a cada hora.
2. Suero de arroz:
Hervir un litro de agua con un trozo de piloncillo o panela, una rama de canela y media taza de arroz remojado.
Dejar hervir a fuego lento por 20 minutos.
Retirar la rama de canela y licuar la mezcla.
Colar y beber.
3. Suero de limón:
Hervir un litro de agua.
Agregar media cucharada de sal, media de bicarbonato de sodio, dos de azúcar y una taza de jugo de limón.
Mezclar bien y dejar enfriar.
Beber en sorbos.
Recomendaciones:
Beber agua constantemente, incluso si no se tiene sed.
Usar ropa ligera y holgada.
Evitar la exposición al sol durante las horas más calurosas.
Consumir frutas y verduras con alto contenido de agua.
En caso de presentar síntomas de deshidratación, beber sueros caseros o acudir a un médico.