Continúa la obra de construcción del sistema de alcantarillado en Molinopamba, jurisdicción de Ricaurte, a 14 kilómetros de Cuenca. Un poco más allá, a uno dos mil metros de distancia, dos familias sufren y lloran en este momento la pérdida de sus proveedores.
Son los allegados de Luis Tigre, de 23 años, y Jimmy Ortega, de 25, quienes murieron aplastados por tierra y lodo cuando trabajaban en dicha obra, la tarde del jueves 23 de febrero.
Las víctimas, nativas de Ricaurte, parroquia rural cuencana, habían aprovechado la construcción para conseguir ingresos económicos como obreros. Laboraron tres meses hasta que ocurrió la tragedia. Posiblemente por las lluvias que soporta la región, se debilitó una de las paredes de la acequia en construcción, la cual cayó con lodo y tierra sobre los dos trabajadores, que perecieron asfixiados.