18 de marzo, una fecha que quedó marcada en la vida de los orenses, quienes palparon en su gran magnitud el movimiento telúrico que dejó, pérdidas humanas, viviendas colapsadas, daños en edificaciones, pérdidas de enseres, en pocas palabras, como ellos mencionan, “lo perdieron todo”.
En el barrio 4 de Abril de la parroquia de Puerto Bolívar en la ciudad de Machala, cerca de 25 familias quedaron sin poder vivir en sus domicilios y tuvieron que permanecer bajo carpas y camas improvisadas. Exigen a las autoridades que se hagan presentes, porque no han cumplido con lo que prometieron en un inicio.
“Nosotros estamos a la deriva, no tenemos ayuda del estado, las casas están por caerse, las viviendas están totalmente destruidas. Las familias están en las calles, no se ha recuperado nada y las autoridades no asoman” lamentó Julio Barreto, quien se encontraba disfrutando de su almuerzo en la calle principal que da a su barriada.
Antiguo Muelle de Puerto Bolívar
Don Juan presenció la caída del antiguo Muelle de Cabotaje de Puerto Bolívar y expresó que le generó mucha pena la caída de la edificación porque representa el patrimonio cultural de la parroquia, fue la casa de la cultura de Puerto Bolívar y se estaba implementando un restaurante.
“Una gran pena, porque esto es un patrimonio de Puerto Bolívar. Todo el mundo que visita el malecón, entraba al muelle, se tomaba su fotito y disfrutaban del restaurante” lamentó Jorge Mora, morador que lleva más de 50 años viviendo cerca del Muelle.
Damnificados de la avenida Boyacá
Tres fallecidos y una persona gravemente herida, fue el fatídico escenario que vivieron los moradores de la avenida Boyacá en Machala.
“Las autoridades están haciendo como que no ha pasado nada. Entonces les pedimos que las autoridades competentes ayuden con cualquier granito de arena, porque somos familias de bajos recursos que no tenemos para remediar los daños” alegó José Mallorca, familiar de los afectados.
Por otro lado, existen edificaciones de instituciones públicas con daños en las infraestructuras y con falta de remediaciones, tal es el caso de la Prefectura de El Oro y el edifcio ex Predesur.
Las autoridades han colocado la cinta de peligro en la base de los edificios; sin embargo, la circulación de lo ciudadanos en mayoritaria, lo que genera una preocupación para los peatones.
“Cuando empezó como una ola el edificio, tuve que correr con mi hija y con mi suegra por el temor del que el edificio se me venga encima” narró Dolores Guamán, comerciante.
La ciudadanía pide a la autoridades que se agilicen los trabajos de remediación tanto a los damnificados como a los edificios que se encuentran en el centro de la ciudad y es un peligro para el pueblo.