En la Cordillera de Kutukú, localizada en el suroriente de Ecuador, se hizo un gran hallazgo: una centrolene kutuku. Se trata de una nueva especie de rana de cristal, denominada así por su vientre transparente que permite ver sus órganos internos.
El anfibio fue descubierto por investigadores del Instituto Nacional de Biodiversidad (Inabio) y las universidades Católica y San Francisco.
En las montañas ecuatorianas hay una gran variedad de ranas de cristal, pero no se había encontrado ninguna especie en la Cordillera del Kutukú hasta ahora. Esta zona es un macizo montañoso subandino antiguo que se formó millones de años antes que la Cordillera de los Andes.
La rana de cristal vive a lo largo de las mesetas de arenisca, en zonas cubiertas de musgos. “Se requieren más investigaciones para determinar su estado poblacional y riesgo de extinción”, indicó el Instituto a través de sus redes sociales.