Durante este fin de semana, el SNAI dio un giro inesperado al manejo de las llamadas cárceles mixtas en el Ecuador, al haber separado a las mujeres de los hombres que permanecen tras las rejas.
528 mujeres fueron trasladadas, desde la cárcel de Cotopaxi hasta la cárcel de Ambato Tungurahua. Mientras que 665 hombres ingresaron a la prisión de Latacunga.
Tras esta decisión están testimonios desgarradores de mujeres que guardaban prisión en estas cuatro paredes, ya que durante las administraciones anteriores, los presos de bandas organizadas las vendían como mercadería para que sean violadas en los diferentes pabellones.
Existen informes de las denuncias realizadas a la Defensoría del Pueblo y la ONU sobre los abusos s3xuales que cometían los reos, cuando tenían el poder de las cárceles en el Ecuador.
