Tras el ataque a tiros a un helicóptero del Ejército de Ecuador en la frontera con Colombia, las autoridades investigan el origen. Hasta el momento, consideran que el hecho fue cometido por disidencias de las antiguas FARC.
Según Omar Sepúlveda, segundo comandante del Ejército colombiano, aún no se tiene confirmación pero la mayor de las posibilidades apuntan a las FARC.
Sin embargo el grupo habría estado «desarrollando una labor de interdicción sobre un laboratorio de clorhidrato de cocaína», asegura el oficial.
El ataque al helicóptero se dio justamente porque fuerzas militares ecuatorianas destruyeron el campamento de procesamiento de cocaína, con capacidad de fabricar unas 15 toneladas de droga al mes.
Los impactos de bala no comprometieron la vida de la tripulación ni el funcionamiento de la aeronave. Los operativos continúan al mismo tiempo que la investigación.