El Océano Ártico podría quedarse sin hielo durante el verano a partir de 2030, mucho antes de lo previsto, y su retroceso tendrá consecuencias catastróficas para el mundo; según un estudio publicado septiembre de 2023 por la revista Nature Communications.
Pese a su importancia, este mar está en peligro y en septiembre llegó a sus mínimos históricos: según los datos de la NASA, los casquetes polares se están reduciendo en un 12,6% por década, en comparación con su extensión promedio durante el período de 1981 a 2010.
A ese ritmo, el Ártico se quedará sin hielo durante el verano a partir de la próxima década o en 2030, mucho antes de lo previsto.
Esta fue la conclusión de un estudio de científicos de Corea del Sur, Canadá y Alemania, que utilizaron datos de observación desde 1979 a 2022 para efectuar sus estimaciones.