Una pensión, ubicada en la calle Sucre, en Pasaje, fue clausurada durante el operativo conjunto entre la Comisaría Municipal y la Comisaría Nacional, instituciones que coordinaron el accionar pertinente con la Dirección de Justicia, Control y Vigilancia del Municipio pasajeño.
El director, Luis Alberto Morocho, indicó que, por denuncias de ciudadanos, se conoció que se estaba alquilando los cuartos -en algunos locales de hospedaje público- para permitir la prostitución clandestina.
“Ante las versiones denunciadas, solicité a las instituciones gubernamentales, involucradas en este tipo de control, que intervinieran en el operativo. Acudió a nuestro llamado, el comisario nacional de Policía, Jamil Zapata, quien acompañó en la inspección, al comisario municipal, Marcelo Orellana”, afirmó el director Morocho.
El comisario Orellana señaló que la mañana del 11 de octubre, junto con el comisario Zapata, recorrieron seis establecimientos dedicados a dar alojamiento, en el centro de la cabacera cantonal.
“Cada cual, en sus competencias, pedimos los respectivos documentos a los administradores de los hoteles, pensiones y/o residenciales; revisamos los cuartos, y nos fijamos en el estado de los colchones y si los aposentos cumplían con las exigencias básicas de limpieza”, mencionó el comisario Orellana.
El funcionario municipal, especificó que, en una pensión, se percataron de la presencia de trabajadoras sexuales, por lo cual, preguntaron a quien estaba a cargo, para dialogar con las inquilinas.
“Conversamos con las ocupantes de los cuartos, y ellas corroboraron que usaban las habitaciones para prostituirse y que, en varias ocasiones, las habían usado para ejercer el negocio sexual. Dado que las pensiones no tienen permiso para ser usadas como lugar de tolerancia, procedimos a clausurar el establecimiento”, destacó Orellana.