Una banana, que durante años ha suscitado controversia en el mundo del arte, se vendió por 6,2 millones de dólares con honorarios en la subasta de arte contemporáneo de Sotheby’s, el miércoles 20 de noviembre por la noche.
Se convirtió en lo que podría decirse que es la fruta más cara del mundo, aunque probablemente se desechará en un par de días.
La banana es la estrella de una obra de arte conceptual de 2019 titulada Comedian, del destacado bromista Maurizio Cattelan, que está destinada a ser pegada a la pared con cinta adhesiva. Viene con un certificado de autenticidad e instrucciones de instalación para que los propietarios reemplacen la banana, si lo desean, cada vez que se pudra.
Cinco minutos de pujas rápidas que habían comenzado en 800.000 dólares terminaron cuando el criptoempresario nacido en China Justin Sun hizo la oferta ganadora, superando a otros seis rivales, lo que, según los expertos, era una señal de que incluso un mercado en dificultades gastaría mucho en espectáculo.
Sun dijo en un comunicado que la obra de Cattelan “representa un fenómeno cultural que une los mundos del arte, los memes y la comunidad de las criptomonedas”.
El empresario, que siguió la subasta desde Hong Kong, añadió: “En los próximos días, personalmente comeré el plátano como parte de esta experiencia artística única, honrando su lugar tanto en la historia del arte como en la cultura popular”.
La obra de Cattelan apareció por primera vez en Art Basel Miami Beach, donde Perrotin Gallery vendió tres ediciones de Comedian por entre 120.000 y 150.000 dólares cada una. Además, se convirtió en una sensación mediática cuando apareció en la portada del The New York Post.
