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Tres reclusos fueron hallados sin vida el domingo 29 de junio en la Penitenciaría del Litoral, la prisión más grande y poblada de Ecuador, ubicada en Guayaquil. Con estos casos, suman ocho los fallecidos en esa cárcel en apenas tres días, ya que entre el viernes y el sábado se reportaron cinco muertes más.
Según información preliminar de la Policía Nacional, los decesos de este domingo se reportaron entre las 10:30 y las 15:00, en los pabellones 2, 4 y 8. Las víctimas tenían 25, 34 y 37 años. Ninguno de los cuerpos presentaba signos visibles de violencia, al igual que los fallecidos en días anteriores, recluidos en los pabellones 1, 4, 8 y 12. Las causas de las muertes aún no han sido confirmadas.
En marzo pasado, el Ministerio de Salud Pública (MSP) alertó sobre un brote de tuberculosis en esta prisión, con cerca de 500 internos bajo tratamiento. Organizaciones de derechos humanos han exigido acciones inmediatas al Gobierno para frenar el avance de enfermedades dentro del sistema carcelario. El 11 de junio, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó al Estado ecuatoriano un informe detallado sobre las condiciones sanitarias y las medidas implementadas en el penal.
La Penitenciaría del Litoral forma parte del complejo carcelario de Guayaquil, que agrupa a cinco prisiones y alberga a cerca de 12 000 personas privadas de libertad. Desde inicios de 2024, las cárceles están bajo control militar, como parte de la declaratoria de conflicto armado interno decretada por el presidente Daniel Noboa para combatir a las bandas criminales.
Desde 2021, más de 500 reos han muerto en las cárceles ecuatorianas, la mayoría en masacres entre grupos delictivos rivales. Esta violencia ha trascendido los muros de las prisiones, contribuyendo a la crisis de seguridad que posicionó a Ecuador como el país con la tasa de homicidios más alta de América Latina.
