El paro nacional impulsado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) llegó este viernes 3 de octubre a su decimosegundo día, con bloqueos en varias vías de la Sierra y manifestaciones en ciudades como Quito y Cuenca.
El jueves, el Consejo Ampliado de la Conaie ratificó la continuidad de la medida y resolvió convocar a sus expresidentes como parte de la estrategia de resistencia. La organización indígena emitió seis resoluciones que delinean los pasos a seguir en esta nueva etapa del paro.
Mientras tanto, el Gobierno mantiene una postura firme: no negociar y no retroceder en la eliminación del subsidio al diésel, principal motivo de las protestas. El Ejecutivo continúa operando desde Latacunga y la vicepresidenta María José Pinto permanece en Otavalo, como parte del plan de descentralización temporal del poder.
Durante estos 12 días, la provincia de Imbabura se ha convertido en el epicentro de las movilizaciones. Las carreteras permanecen bloqueadas y en ciudades como Ibarra, Otavalo y Cotacachi el comercio está paralizado. En medio de estas restricciones, se organizó un operativo humanitario que permitió el ingreso de oxígeno al hospital de Otavalo, garantizando la atención de pacientes en estado crítico.
En la Sierra centro y sur, comunidades indígenas de Bolívar, Chimborazo y Cañar se han sumado al paro, bloqueando diferentes tramos de la vía Panamericana y reforzando la presión sobre el Gobierno.