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La iniciativa del presidente de la Asamblea Nacional, Niels Olsen, para disminuir de 48 a 18 horas la vigencia de la ley seca en periodos electorales, depende ahora de que la legislatura tramite una reforma al Código de la Democracia en un tiempo récord, si pretende que esta entre en vigencia para las elecciones seccionales de 2027.
El proyecto fue calificado en solo 72 horas tras su ingreso a la ventanilla legislativa, movimiento que fue seguido por una decisión polémica del Consejo de Administración Legislativa (CAL), que asignó el trámite a la Comisión de Desarrollo Económico, Productivo y la Microempresa, en lugar de remitirlo a la Comisión de Justicia, que normalmente procesa reformas al Código de la Democracia.
No es la primera vez que esta comisión, presidida por la asambleísta Valentina Centeno (ADN), intenta incorporar la reforma. Ya lo hizo durante el debate del proyecto urgente sobre áreas protegidas y en junio de 2025 durante otra propuesta de cambios electorales, pero en ambas ocasiones no prosperó por falta de apoyo interno de su propia bancada.
¿Qué plantea la reforma?
Olsen propone modificar el artículo 123 de la Ley Orgánica Electoral, que actualmente prohíbe la venta, distribución y consumo de alcohol 36 horas antes, durante la jornada electoral y hasta 12 horas después.
El nuevo texto reduciría ese plazo a:
12 horas previas al inicio de votación
6 horas posteriores al cierre de las urnas
Para justificar el recorte, el presidente de la Asamblea cita un informe de la Confederación de Restaurantes del Ecuador de mayo de 2025, que estima que cada jornada electoral representa pérdidas de USD 15 millones para los sectores de gastronomía, hotelería, entretenimiento y turismo, acumulando más de USD 112 millones en cinco años.
Un trámite con plazos ajustados
La Ley Orgánica de la Función Legislativa establece que el informe de primer debate debe elaborarse en un máximo de 90 días, pero no puede emitirse en menos de 20 días, de los cuales 15 deben dedicarse a socialización ciudadana.
Sin embargo, ese calendario choca con la vacancia legislativa, que va del 22 de diciembre de 2025 al 5 de enero de 2026, periodo en el que no se podrán conocer informes.
A esta presión se suma que, en febrero de 2026, el Consejo Nacional Electoral (CNE) declarará el inicio del periodo electoral para los comicios de 2027. Desde ese momento, la normativa vigente prohíbe realizar reformas electorales un año antes de las elecciones.
En otras palabras, si la Asamblea no acelera el proceso, la reducción de la ley seca —considerada por Olsen como una medida para mitigar efectos económicos adversos— no podrá aplicarse en los próximos comicios seccionales.
