ActualidadNoticiasPortadaSalud

Muertes por hipertensión en Ecuador, subieron 51% en cuatro años

Las enfermedades cardiovasculares, entre ellas la hipertensión, son la primera causa de muerte en Ecuador. Este mal, en particular, registra un aumento de defunciones del 51% en cuatro años; 1 933 personas hipertensas fallecieron con ese diagnóstico en 2021, según datos del Instituto de Estadísticas y Censos (INEC).

Pero la cifra real sería más elevada. La encuesta STEPS del Ministerio de Salud Pública (MSP) concluye que el 20% de la población mayor de 19 años es hipertensa. Son casi 2,1 millones de ecuatorianos que viven con la enfermedad, pero no todos lo saben.

“Se calcula que el 46% de personas hipertensas no conoce su diagnóstico. Y entre quienes sí saben, apenas uno de cada cinco está bien controlado”, asegura Omar Medina, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Luis Vernaza, de la Junta de Beneficencia de Guayaquil.

Es poco común que la hipertensión se asocie con muerte, debido a la facilidad en la detección y acceso a tratamiento. Sin embargo, es la puerta de entrada a complicaciones fatales como derrames cerebrales, infartos y otros males cardiovasculares. Este grupo de patologías elevó la mortalidad en un 73% entre 2018 y 2021.

Hipertensión, un mal en aumento

Tardó meses en llegar a un diagnóstico. Ana María Díaz soportó durante meses intensos dolores de cabeza. “Pensé que era efecto del estrés, porque con el teletrabajo la rutina se volvió más demandante y extendida; pero era hipertensión”.

Antes de llegar a un cardiólogo, Díaz recuerda que experimentó otros síntomas: ligeros mareos, una sensación de zumbidos, ver fugaces destellos y una angustia que le causaba fuertes dolores de pecho.

“Estaba marcando 130/90 y en ocasiones más”, recuerda de una prueba de monitoreo de presión arterial de 24 horas. Ahora, a sus 39 años, sigue tratamiento con medicina.

Expertos coinciden en que la pandemia detonó un aumento de nuevos casos de hipertensión en el mundo, que será más marcado en el transcurso de 10 años. Entre las causas se investiga la reacción inflamatoria que el SARS-CoV-2 genera en el organismo y el estrés por el confinamiento.

Diabetes y fallo renal, problemas asociados

No llega sola. Cuando la hipertensión se diagnostica de forma tardía es muy probable que haya desencadenado otras patologías como diabetes e insuficiencia renal.

Gabriela Torres dirige el área de Endocrinología del Luis Vernaza y explica que hasta el 80% de los pacientes con diabetes tipo II tiene hipertensión. Esto se debe a que la presión elevada inhibe la producción de insulina, causando un aumento de glucosa.

Cuando la presión marca 130/80 en más de dos mediciones y en ocasiones distintas es una clara señal de hipertensión. Esta elevación continua daña y causa el estrechamiento de las arterias.

Algunas de las arterias más pequeñas irrigan los riñones y por eso la hipertensión disminuye la función renal. El nefrólogo Wilter Ferrín agrega otros efectos en cadena, como la alteración de proteínas y la elevación de los niveles de sodio.

Con información de El Comercio

Deje su comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *