El 8 de diciembre de 1548, por orden de Pedro de la Gasca, el capitán Alonso de Mercadillo fundó la Ciudad de la Inmaculada Concepción de Loja en el “valle de Cuxibamba”, una región estratégica por su clima y geografía, un hecho clave en la Historia del Ecuador.
El nombre de esta ciudad, tiene origen español, inspirado en Loja de Granada, lugar natal de su fundador.
Desde su fundación, Loja ha destacado por su trazado urbano organizado, centrado en una plaza principal rodeada de iglesias, edificios coloniales y sus dos ríos Malacatos y Zamora.
En el período colonial, Loja se consolidó como un centro de comercio, cultura y centro de expediciones hacia la Amazonía.
Su ubicación estratégica facilitó el intercambio de productos entre la Sierra y la Costa, principalmente minerales y producción agropecuaria.
La minería, con enclaves en Zaruma y Zamora, fue el eje fundamental en la economía de esta región sureña del Ecuador.
Figuras como Benjamín Carrión Mora, Matilde Hidalgo de Procel, escritores, juristas, poetas, músicos e intérpretes, trascienden con el paso del tiempo.