Ecuador

Las enfermedades cerebrovasculares son la tercera causa de muerte en Ecuador

Cuatro horas y media es el tiempo que un paciente tiene para salvar su vida, tras sufrir un accidente cerebrovascular. Es la advertencia que hacen especialistas sobre esta enfermedad, que según el Instituto Ecuatoriano de Estadística y Censos (INEC), es una de las principales causas de muerte y discapacidad en Ecuador. En 2023, 4 632 personas fallecieron por este diagnóstico.

«El paciente debe acudir inmediatamente cuando detecte un cambio sea en la fuerza motora de movimiento, de compresión, de articular palabras o de seguir comandos», explica Pedro Baquerizo, director médico de UEES Clinic

Quienes llegan con síntomas de alerta a la emergencia de un hospital, son sometidos a la escala NIHSS, un protocolo que poseen los centros especializados para tratar derrames cerebrales o stroke ready center. Ese protocolo de abordaje es complementado con un diagnóstico por imágenes.

«La primera a la mano es la tomografía computarizada que debe estar todo esto en menos de 10 a 15 minutos», añade Pedro Baquerizo, director médico de UEES Clinic

De acuerdo al daño o lesiones en el cerebro, el paciente debe ser sometido a procedimientos quirúrgicos, a cargo de un neurocirujano.

«Subiendo hasta el lugar de la oclusión con un cateterismo, localizando la obstrucción, en este caso el coágulo, y utilizando técnicas especificas para sacar este coágulo y restituir nuevamente el flujo sanguíneo», menciona Luis Moreira, neurocirujano vascular de UEES Clinic

El riesgo de no atender a tiempo estos cuadros puede causar daños permanentes, pues según especialistas, las células cerebrales mueren cuando no llega el flujo sanguíneo suficiente.

«Secuelas como no poder mover un brazo, no poder mover una pierda, no poder hablar, asimetría facial», dice Luis Moreira, neurocirujano vascular de UEES Clinic

Los factores de riesgo son:

  • Hipertensión
  • Diabetes
  • Colesterol alto
  • Tabaquismo
  • Estrés crónico
  • Males cardíacos

Aunque la enfermedad es frecuente en personas mayores de 50 años y más en hombres, los médicos advierten que han tratado a jóvenes de 22 años, que no tomaron en cuenta un patrón genético y no se sometieron a exámenes preventivos.

Artículos relacionados

1 de 281