La próxima Asamblea Nacional heredará una carga desproporcionada de leyes represadas durante los últimos 15 años.
En total, son 1 338 que están pendientes desde agosto de 2009 hasta agosto de 2024; en cifras, para igualarse tendrá 1 460 días de trabajo, de 2005 a 2029, por lo que debería despachar un proyecto de ley al día.
Las propuestas legislativas que están a la espera abordan reformas legales, nuevas leyes o temas como educación, seguridad social, derogatorias, protección de derechos, minería; entre otros.
Todos están en trámite, pero algunos, para ser aprobados, necesitan ser tratados en primer o segundo debate; en revisión del Consejo de Administración Legislativa (CAL) o respuesta pendiente en la Corte Constitucional (CC).
Ante esta realidad, Marcelo Espinel, subdirector de la Fundación Ciudadanía y Desarrollo (FCD) señala que «en el último periodo de transición, se presentaron más de 500 proyectos de ley; esto no tiene sentido, considerando que los asambleístas aprueban entre 60 u 80 leyes en cuatro años».
¿Qué debería hacer la próxima Asamblea para igualarse?
Entre las 1 338 iniciativas represadas hay algunas que abordan una misma ley y pueden fusionarse para reducir la carga laboral. El asambleísta por Guayas, Jorge Acaiturri, recomienda «conformar en el Consejo de Administración Legislativa, un equipo que analice qué proyectos tienen que agruparse y cuáles archivarse».
Además, recomienda que las bancadas lleguen a un acuerdo para abstenerse de presentar nuevos proyectos durante los primeros tres o cuatro meses.
Por su parte, Henry Cucalón, exasambleísta y ministro de Gobierno, explica que hay un problema cultural entre los asambleístas, pues presentan gran cantidad de leyes para que «no piensen que son vagos».
Andrés Castillo, asambleísta electo por ADN, coincide con Cucalón y acota que los legisladores le tienen «miedo» al informe de Gestión y Transparencia de la Asamblea Nacional, de Fundación Ciudadanía y Desarrollo (FCD), por ende presentan proyectos sin control.
Una de las reformas pendientes son al Código Orgánico de la Niñez y Adolescencia (CONA) que todavía no tiene informe para segundo debate, a decir de Cucalón, «no se han aprobado por problemas políticos y de votaciones».
El 14 de mayo se posesionan 151 legisladores, quienes llegan con trabajo acumulado y nuevos retos para enfrentar las crisis que preocupan a los ecuatorianos