Es evidente que la región de El Oro está enfrentando graves problemas de infraestructura vial debido a los daños causados por el invierno. La situación es especialmente crítica en la que va desde Piñas hacia la parroquia de Saracay, donde se han detectado problemas significativos en la carpeta asfáltica, particularmente en los sectores de Monos y Las Bateas.
Además, el deslave ocurrido en el sector Piedra Hendida ha dejado aislados a los cantones Atahualpa y Piñas, lo que ha requerido desviar el tráfico hacia vías alternas para garantizar la movilidad de las personas.
La vía Piñas – Capiro también ha sido afectada, con derrumbes que obstaculizan el paso y dificultan el transporte hacia esa parroquia. Situaciones como el ocurrido en Tahuín, donde la gente tuvo que enfrentar condiciones adversas para continuar su camino, son muestra de la gravedad de la situación.
Es alentador ver la respuesta coordinada de las autoridades locales, incluyendo el Municipio, la Prefectura de El Oro, las Juntas Parroquiales y el Cuerpo de Bomberos, que están trabajando arduamente para atender los daños y brindar asistencia a las familias afectadas.
La convocatoria de una reunión urgente del COE cantonal por parte de la Alcaldesa Teresa Feijóo demuestra una acción proactiva para evaluar la situación y tomar medidas inmediatas. Es fundamental que se aborde esta crisis de manera integral, considerando tanto la reparación de la infraestructura vial como la asistencia a las comunidades afectadas.