El Presidente de la República, Guillermo Lasso, le dijo a The Washington Post, que no se lanzará a la reelección, una vez que se decretó la muerte cruzada el pasado miércoles 17 de mayo del 2023.
“Un día después de disolver la Asamblea Nacional, al evitar su inminente juicio político pero provocando nuevas elecciones este año, el presidente ecuatoriano Guillermo Lasso dijo que no tiene planes de postularse en ellas, y que no le importa quién lo reemplace”. Así dice el reportaje del diario estadounidense publicado este viernes 19 de mayo.
“Mi objetivo no es evitar que alguien regrese a Ecuador’, dijo a The Washington Post en una entrevista realizada el jueves por la noche. Se refería al partido de su rival izquierdista Rafael Correa, el presidente elegido democráticamente con más años de servicio en el país y todavía un líder influyente aquí”.
Los comicios y la reelección de Guillermo Lasso
Con el decreto de muerte cruzada, el Ejecutivo pidió al Concejo Nacional Electoral (CNE) que convoque a elecciones. El organismo electoral se reunió la noche del jueves y ya tiene un calendario que debe oficializarlo hasta el próximo lunes 24 de mayo.
Aparte de la declaración de que no optará por la reelección, Lasso explicó que su objetivo no es estar en contra de otros personajes políticos. “Mi objetivo no es evitar que alguien regrese a Ecuador’, le dijo a The Washington Post en una entrevista el jueves por la noche. Se refería al partido de su rival izquierdista Rafael Correa, el presidente elegido democráticamente con más años de servicio en el país y todavía un líder influyente aquí”.
El pasado miércoles, consultada por la prensa, la Presidenta del. CNE, Diana Atamaint dijo que Lasso no tenia impedimento para lanzarse a los nuevos comicios.
Nuevo decreto sobre seguridad
Por otra parte, Lasso aseguró al medio norteamericano que planea expedir un decreto “que aumentaría las protecciones para las fuerzas de seguridad que usan sus armas para defenderse a sí mismos y a otros”. Este sería expedido la próxima semana.
Lasso le dijo al Washington Post que ese nuevo decreto pretende dar “más confianza, tranquilidad y seguridad a nuestras fuerzas del orden, para que puedan usar sus armas dotadas para proteger a ciudadanos inocentes y también a ellos mismos”.