El año 2024 tendrá 366 días, uno más que los habituales 365. Esta particularidad, conocida como año bisiesto, tiene una explicación científica.
La Tierra tarda aproximadamente 365,2422 días en dar una vuelta completa alrededor del Sol. Sin embargo, el calendario gregoriano, que es el que se utiliza en la mayoría de los países, tiene 365 días. Esto significa que, con el paso de los años, se va acumulando una diferencia entre el calendario y el tiempo real.
Para compensar esta diferencia, se agrega un día adicional al calendario cada cuatro años. Este día adicional se llama «día bisiesto» y se agrega al mes de febrero, que pasa de tener 28 días a 29.
El año 2024 es bisiesto porque es divisible por 4. Sin embargo, hay una excepción a esta regla: los años divisibles por 100 no son bisiestos, a menos que también sean divisibles por 400. Esto significa que el año 2100 no será bisiesto, pero el año 2000 sí lo fue, porque también es divisible por 400.
El año bisiesto tiene una serie de implicaciones prácticas. Por ejemplo, los Juegos Olímpicos se celebran siempre en un año bisiesto. Además, los cumpleaños que caen en febrero 29 se celebran cada cuatro años.