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El presidente de la República, Daniel Noboa, reformó el procedimiento para la compra de medicamentos, con el objetivo de enfrentar la persistente crisis de desabastecimiento que afecta a los hospitales públicos del país.
Mediante un decreto ejecutivo, el mandatario introdujo una modificación al reglamento de la Ley del Sistema Nacional de Contratación Pública, permitiendo que los procesos de contratación directa puedan repetirse las veces que sean necesarias cuando una adjudicación sea declarada fallida.
La decisión se adopta tras la fallida declaratoria de emergencia para la adquisición de medicamentos e insumos médicos. Aunque el plazo inicial de 60 días fue ampliado, hasta el momento no se ha logrado un abastecimiento efectivo en la red pública de salud.
Contratos fallidos y baja adjudicación
Las cifras oficiales del Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop) evidencian la magnitud del problema. El Ministerio de Salud levantó una necesidad de 765 procesos de contratación, de los cuales apenas 255 fueron adjudicados, lo que representa solo el 33 % del total.
La situación es aún más crítica en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). La entidad inició 350 procesos, pero únicamente 52 lograron adjudicarse, es decir, alrededor del 15 %. Este bajo nivel de contratación mantiene las bodegas hospitalarias en estado crítico, afectando directamente la atención a los pacientes.
Medicamentos faltantes
La consecuencia directa de esta crisis recae sobre los usuarios del sistema de salud pública, que enfrentan la falta de fármacos esenciales.
Marcelo Aguilar, exviceministro de Salud, detalló que los procesos desiertos corresponden principalmente a medicamentos para enfermedades crónicas, como diabetes e hipertensión arterial, además de antiinflamatorios y antibióticos, considerados básicos en la atención médica.
Tercer intento para enfrentar la crisis
Esta reforma constituye el tercer intento del Ejecutivo para enfrentar el problema de desabastecimiento. Inicialmente se creó un Comité de Salud, posteriormente se declaró una emergencia sanitaria para agilizar las compras y, ahora, se opta por modificar el procedimiento de contratación pública.
Con este cambio, el Gobierno busca destrabar los procesos administrativos y garantizar el suministro oportuno de medicamentos e insumos médicos en los hospitales públicos del país.
