La Liga Pro, encabezada por el presidente Miguel Ángel Loor, tiene una gran deuda pendiente con los árbitros del fútbol ecuatoriano, situación que causó inconvenientes en el reinicio de la segunda etapa de la Liga Pro.
Hasta julio del presente año, el valor ascendía a $ 1′400.000 (por conceptos de salarios y viáticos), de los cuales, hasta dicho momento, la entidad nacional solo pagó $ 500.000.
Actualmente, al organismo que realiza el campeonato ecuatoriano aún le queda mucho por pagar y está creando un plan para finalizar esta deuda lo más pronto posible.
“Estamos tratando de pagar a los árbitros a medida que recibimos ingresos, es una obligatoriedad netamente de la liga; los clubes ya no les pagan a los árbitros, con el cambio completo”, señaló Loor.
“A mitad de año queremos ir abonándoles a los árbitros para que terminen lo mejor pagados este año y no empiecen el 2025 sin estar al día, como siempre”, agregó el mandatario.