Cuenca cumple este viernes, 8 de diciembre, 100 días de la sequía más larga de la que existen registros, según informó la empresa municipal ETAPA.
Aunque han existido lluvias esporádicas, eso no ha sido suficiente para superar el estiaje, detalla la Empresa Municipal de Agua Potable (ETAPA). La empresa ha calificado a este periodo como «sequía hidrológica», que ocurre cuando las reservas de agua disponibles, como ríos, acuíferos o lagunas, caen por debajo de la media estadística.
Los pronósticos de la Red Hidrometeorológica de ETAPA indican que las probabilidades de lluvias para los próximos días están por debajo del 50%, por lo que se prevé que la sequía se extienda por un tiempo más, reseñó Primicias.
Además, el Instituto Nacional de Hidrología y Meteorología (Inamhi) pronostica altas temperaturas diurnas en Azuay hasta el 13 de diciembre.
Por otro lado, las condiciones extremas en Cuenca, ya sea de lluvia o estiaje, son una consecuencia del cambio climático, según información de la Subgerencia Ambiental de Etapa.
La sequía es evidente en los cuatro ríos que atraviesan Cuenca, que casi no tienen agua. El Tomebamba es el más afectado: durante los últimos 100 días se han registrado los caudales más bajos, incluso en épocas donde las inundaciones suelen ser habituales.
Este viernes, el río Tomebamba tiene un caudal de 0,67 metros cúbicos por segundo, cuando el promedio normal está entre cinco y siete metros cúbicos por segundo. Los ríos Yanuncay, Tarqui y Machángara también mantienen caudales por debajo del promedio.