El Himno Nacional del Ecuador es una pieza clave en la identidad y el patriotismo de los ecuatorianos. Su letra fue escrita por el poeta Juan León Mera, mientras que la música fue compuesta por el músico Antonio Neumane. El himno fue adoptado oficialmente en 1865 y se ha convertido en un símbolo de unidad para el país.
La letra del himno está compuesta por un total de seis estrofas, aunque generalmente solo se cantan el coro y la segunda estrofa en actos oficiales.
El cántico no solo resalta la belleza de su territorio, sino que también hace referencia a la lucha histórica por la independencia. En sus versos se invoca el sacrificio y la valentía de los ecuatorianos que, a lo largo de los siglos, han defendido la soberanía nacional. Cada palabra tiene un profundo significado de orgullo y un llamado al amor por la patria.
El “Salve, oh Patria” que se repite en el coro es un acto de veneración a la nación y simboliza el respeto y el reconocimiento hacia la historia y los logros del Ecuador. Así, el Himno Nacional sigue siendo una de las expresiones más poderosas de la identidad nacional ecuatoriana.
Letra completa del Himno Nacional del Ecuador:
CORO
¡Salve oh Patria, mil veces! ¡Oh Patria!
Gloria a ti! Ya tu pecho rebosa
gozo y paz y tu frente radiosa
más que el sol contemplamos lucir.
Primera estrofa
Indignados tus hijos del yugo
que le impuso la ibérica audacia,
de la injusta y horrenda desgracia
que pesaba fatal sobre ti,
santa voz a los cielos alzaron,
voz de noble y sin par juramento,
de vengarte del monstruo sangriento,
de romper este yugo servil.
[Coro]
Segunda estrofa
Los primeros los hijos del suelo
que soberbio el Pichincha decora
te aclamaron por siempre señora
y vertieron su sangre por ti.
Dios miró y aceptó el holocausto,
y esa sangre fue germen fecundo
de otros héroes que, atónito, el mundo
vio en tu torno a millares surgir.
[Coro]
Tercera estrofa
De estos héroes al brazo de hierro
nada tuvo invencible la tierra,
y del valle a la altísima sierra
se escuchaba el fragor de la lid; tras la lid la victoria volaba,
libertad tras el triunfo venía,
y al león destrozado se oía
de impotencia y despecho rugir.
[Coro]
Cuarta estrofa
Cedió al fin la fiereza española,
y hoy, oh Patria, tu libre existencia
es la noble y magnífica herencia
que nos dio, el heroísmo feliz:
de las manos paternas la hubimos,
nadie intente arrancárnosla ahora,
ni nuestra ira excitar vengadora
quiera, necio o audaz, contra sí.
[Coro]
Quinta estrofa
Nadie, oh patria, lo intente. Las sombras
de tus héroes gloriosos nos miran,
y el valor y el orgullo que inspiran
son augurios de triunfo por ti.
Venga el hierro y el plomo fulmíneo,
que a la idea de la guerra y venganza
se despierte la heroica pujanza
que hizo al fiero español sucumbir.
[Coro]
Sexta estrofa
Y si nuevas cadenas prepara
la injusticia de bárbara suerte
¡gran Pichincha! prevén tú la muerte
de la Patria y sus hijos al fin;
hunde al punto en tus hondas entrañas
cuanto existe en tu tierra: el tirano
huelle solo cenizas, y en vano
busque rastro de ser junto a ti.