Los cálculos renales, también conocidos como piedras en los riñones, son depósitos duros de minerales y sales que se forman dentro de los riñones. Pueden causar dolor intenso, náuseas y vómitos.
Existen diferentes tipos de cálculos renales, según los minerales y sales que los componen. Los más comunes son los de calcio, estruvita, ácido úrico y cistina.
Síntomas
Los cálculos renales pueden no causar síntomas hasta que se mueven por los uréteres, los tubos que transportan la orina desde los riñones a la vejiga. Cuando esto sucede, los cálculos pueden bloquear el flujo de orina y causar dolor intenso.
El dolor de los cálculos renales suele sentirse en la parte baja de la espalda o en el abdomen. Puede ser intenso y punzante, y puede irradiarse a la ingle, los testículos o los labios.
Otros síntomas de los cálculos renales pueden incluir: sangre en la orina, náuseas y vómitos, escalofríos y fiebre, dificultad para orinar y orina turbia o con olor
Prevención
No existe una forma segura de prevenir los cálculos renales, pero hay algunas cosas que puede hacer para reducir el riesgo:
Beba mucha agua. Los expertos recomiendan beber al menos 2 litros de agua al día.
Evite los alimentos ricos en oxalatos. Los oxalatos son un tipo de ácido que puede contribuir a la formación de cálculos renales. Los alimentos ricos en oxalatos incluyen las espinacas, las acelgas, los ruibarbos, los frutos secos, el chocolate y las bebidas con cafeína.
Limite su consumo de sal. La sal puede aumentar la cantidad de calcio en la orina, lo que puede aumentar el riesgo de cálculos renales.
Si tiene antecedentes familiares de cálculos renales, hable con su médico sobre las medidas que puede tomar para reducir su riesgo.
En la mayoría de los casos, los cálculos renales pequeños se eliminan por sí solos. Si el cálculo es grande o no puede pasar por el uréter, es posible que necesite tratamiento médico.
Los cálculos renales pueden ser dolorosos e incómodos, pero hay muchas cosas que puede hacer para reducir el riesgo de desarrollarlos. Beba mucha agua, evite los alimentos ricos en oxalatos y limite su consumo de sal.