China avanza en la construcción de lo que expertos ya califican como un hito de la ingeniería mundial: la primera isla artificial flotante, móvil y autosuficiente del planeta, diseñada para resistir tifones extremos, olas de gran magnitud e incluso explosiones nucleares.
El ambicioso proyecto es desarrollado por investigadores de la Universidad Jiao Tong de Shanghái, quienes presentaron la plataforma como una estructura capaz de operar de forma independiente durante largos periodos en altamar. Según información difundida por el medio español 20 Minutos, la isla se construye en el Mar de China Meridional.
La plataforma tendrá 138 metros de largo y 85 metros de ancho, con una cubierta situada a 45 metros sobre el nivel del mar. Su diseño contempla la autosuficiencia energética y operativa, permitiendo la permanencia de hasta 238 tripulantes durante aproximadamente cuatro meses sin necesidad de reabastecimiento.
Uno de los aspectos más sorprendentes del proyecto es su sistema de blindaje especial, desarrollado a partir de paneles tipo “sándwich” de metamateriales y tubos corrugados, lo que permite que la estructura absorba ondas de choque, reduciendo el estrés del casco en un 14% y el desplazamiento por explosión en casi un 60%.
Además, la estructura está preparada para resistir olas de entre 9 y 10 metros de altura, así como tifones de categoría 17, el nivel más alto dentro de esta clasificación de ciclones.
De acuerdo con información difundida por medios internacionales como Radio Mitre y Xataka, el argumento oficial de las autoridades chinas para justificar el desarrollo de esta megaplataforma se basa en la necesidad de garantizar la continuidad de centros de mando, sistemas de energía y control de navegación ante catástrofes naturales o fallas operativas en tierra firme.
El objetivo principal es mantener la capacidad operativa en altamar, incluso cuando las bases terrestres queden comprometidas por fenómenos extremos como súper tifones u otros eventos de alta magnitud.
Este proyecto representa un salto tecnológico sin precedentes, que podría redefinir el concepto de infraestructura marítima, seguridad estratégica y operaciones autónomas en los océanos.
Radio











