El país perderá, durante los próximos 20 años, unos 14.709 millones de dólares por dejar el crudo del Yasuní ITT bajo suelo.
- 467 millones de dólares son los costos por el abandono técnico del campo
- 251 millones por pérdida de empleo y compensación social a 20 años
- 1 952 millones por pérdidas asociadas a inversiones realizadas durante este 2023
- 12 039 millones por el cierre de operaciones.
El año pasado la producción petrolera del ITT fue de 1 108 millones de dólares, lo que equivale al 1 % del Producto Interno Bruto y financia sectores como salud, educación asignación a los gobiernos autónomos descentralizados, compra de combustibles y también inversión en los municipios.
Desde el 2015 hasta el 2022, la venta de petróleo representó, en promedio, el 29% del total de ingresos para el sector público no financiero; de esta cifra, aproximadamente, el 4,1% provino de la exportación y venta interna de derivados de petróleo extraídos del bloque 43.
La Corte Constitucional dispuso el nueve de mayo, en la aprobación del dictamen que dio paso a la consulta, un retiro progresivo y ordenado de toda actividad relacionada a la extracción de petróleo en un plazo no mayor a un año desde la notificación de los resultados oficiales.
Los datos son parte del estudio sobre los impactos macroeconómicos de mantener el crudo bajo suelo, que publicó el Banco Central del Ecuador la semana anterior.