Un nuevo incendio forestal se declaró el viernes en una zona de las afueras de Atenas, mientras el riesgo de incendio en otros lugares de Grecia sigue siendo “muy alto” debido al esperado aumento de las temperaturas y los fuertes vientos.
El nuevo incendio se declaró en el municipio de Koropi, a 30 km al este de Atenas. La Protección Civil pidió a los residentes que se mantuvieran alejados de la zona.
Se propagó rápidamente por la zona, que incluye numerosas viviendas rodeadas de densa vegetación y se extiende hasta la orilla del mar Egeo, en el golfo Sarónico.
Unas 800 personas fueron evacuadas, anunció el portavoz de los bomberos, Vasilios Vathrakoyannis.
Las llamas “adquirieron rápidamente proporciones peligrosas” debido al viento, con múltiples focos de incendio, dijo.
La población había recibido alertas por teléfono móvil de Protección Civil.
Varias carreteras de las afueras de Atenas fueron cerradas al tráfico.
Sin embargo, al final de la tarde, un portavoz de los bomberos anunció que el incendio se encontraba ahora “en fase de regresión”.
Un total de 120 bomberos fueron desplegados en el lugar, apoyados por 30 vehículos, ocho aviones y ocho helicópteros, según el vocero.
Sigue habiendo preocupación para los próximos días, especialmente para el sábado, cuando se espera que las temperaturas superen los 40 ºC.
“El riesgo de incendios sigue siendo muy alto para mañana”, declaró el viernes a AFP un responsable de la oficina de prensa de los bomberos.
Por otra parte, el incendio que se declaró el miércoles por la noche en Creta y que provocó 5.000 evacuaciones, entre ellas las de numerosos turistas, “está retrocediendo”, declaró a AFP el servicio de bomberos.
En las últimas 24 horas se declararon 47 incendios de vegetación agrícola y forestal, la mayoría de los cuales ya fueron controlados, según los bomberos.